El Mastuerzo: la voz disidente
Nació en mero Tulancingo un 23 de noviembre, nació de muy buena mata, Francisco Barrios por nombre, “El Mastuerzo”, la pura banda.
Si me lo preguntan, entrevistar a una leyenda que, además, es un ídolo personal, podría parecer que no es nada fácil, pero El Mastuerzo hace que todo transcurra entre risas, anécdotas, cigarros, tragos y café del que se bebe y también del que se fuma.
Así transcurrió el encuentro que tuvimos en su casa, en algún lugar de Coyoacán en octubre de 2021.
Los inicios de Paco Barrios en la música se remontan al grupo Los Nakos, formado por Ismael Colmenares a partir del Movimiento Estudiantil de 1968, a donde se integraría en 1976. Con ellos participó en los discos Los Nakos y La Lengua.
Paco estaba a cargo de la batería, las percusiones y de esa voz legendaria y característica, ejemplo de congruencia entre su postura política y su arte; una voz siempre disidente y subversiva, crítica al poder, cercana al pueblo, al lado correcto de la historia.
La historia del rock mexicano no estaría completa sin la emblemática banda Botellita de Jerez, formada en 1983 con Sergio Arau (guitarra), Armando Vega-Gil (bajo) y, por supuesto, Paco Barrios (batería) en su alineación original y que tras la salida de Arau se conoció como la HH Botellita de Jerez agregando a Santiago Ojeda (guitarra) y Rafael González (teclados).
La Botella mezclaba todo tipo de ritmos, letras satíricas, humor, crítica, amor a lo mexicano, combinación de la que resultó el único y original guacarrock.
Entre su discografía se cuentan álbumes como Botellita de Jerez (1985), La venganza del Hijo del Guacarock (1985), Naco es Chido (1987), Niña de mis Ojos (1989), Busca Amor (1990), Todo lo que digas será al revés (1992), Forjando Patria (1994), Superespecial Un Plug (1996), El Último Guacarrock (1998) de donde se desprendieron canciones emblemáticas como «Alármala de tos», «Charrock and roll», «¡Saca!», «Return to Aztlan», «El Santos contra la Tetona Mendoza», «Abuelita de Batman», «El Santo», «La Baticumbia», «El Ropavejero», «Niña de mis ojos» o «Luna Misteriosa» entre muchas otras que dejaron una huella indeleble en el imaginario mexicano.
Irreverentes, contestatarios, provocadores: “lo naco es chido”, decían. Y sí.
En 2010, se presentó el proyecto El Mastuerzo y Los Jijos del Maíz, formado por Iker Moranchel (guitarra), Josué Vergara (batería) y Gustavo Franco (bajo) con canciones como “La ventana y el umbral” que nació de la idea de un prólogo para el libro homónimo de Armando Vega-Gil; “Toque de queda (Abusados con el apañón)” o “Alicia, amor de mi vida”.
Como solista, Paco Barrios cuenta con álbumes como Prohibido (1996), Podrid@ (2001), Kbezakhabla Zabalburu (2005), Tributo a la Otra Kancion Popular Mexikana, Rolópera en Seis Movimientos (2006), Guadalupe Reyes-Suite para dormir la mona (2012), El Mastuerzo y los Jijos del Maíz (2014) y el más reciente Directo desde Barnasants (2020).
Pero la carrera de El Mastuerzo también ha sido de activismo político, acompañando (y suscribiendo) a movimientos sociales como la lucha del Sindicato Mexicano de los Electricistas, la Huelga Estudiantil de 1999, ha ofrecido conciertos como actos políticos como el «Mitin con Música» como apoyo a los padres de los 43 normalistas desaparecidos desde septiebre de 2014 y, por supuesto, el Ejército Zapatista de Liberación Nacional.
Su carrera ha estado llena de contrastes, desde tocar en el penal de Almoloya, el Teatro Metropolitan, bares y cafés cantantes a lo largo de todo el mundo, universidades, parques o cualquier lugar donde haya público hambriento de música con sentido social, político, como sucede con su canción «Prohibido», dedicada siempre a la 6.a declaración de la Lacandona de los Zapatistas y al Comité de Madres de los presos y desaparecidos políticos y las Madres de la Plaza de Mayo. Arte en toda la extensión de la palabra.
El Mastuerzo es un hombre siempre cercano a la gente, un artista que no pone barreras con su público.
“Desde siempre nuestro mánager sabe que estamos dispuestos a todo. Sabía que terminando el toquín era recibir a huevo a toda la gente, organizadamente, fueran cuantos fueran. Para mí era un gozo las fotos, autógrafos, más allá de la egolatría era establecer una relación verdadera con ciertos seres humanos aunque fuese tan efímera”.
Paco Barrios prefiere las entrevistas a una radio comunitaria que a grandes cadenas televisivas. Sobre él se han escrito tesis de psicología, historia, sociología e incluso el Colegio de San Luis (COLSAN) tiene en resguardo el Archivo Francisco Barrios donde se incluyen pósteres, fotografías, su guitarra, premios, máscaras y notas de periódico que conforman un acervo que pronto estará disponible digitalmente.
Como a todos, la pandemia afectó a Paco en el aspecto de las presentaciones en vivo, pero también disparó su creatividad. En entrevista, nos contó que las restricciones sanitarias lo tomaron por sorpresa en Barcelona el 10 de marzo de 2020, cuando por la noche le cancelaron las presentaciones que tenía en los días posteriores sin poder salir de la cuidad.
Al llegar a México, durante el confinamiento grabó canciones inéditas, hizo transmisiones en vivo y presentó su Radio Tendedero Café Tv en Facebook, hasta que al cambiar los semáforos retomó las presentaciones en vivo y desde entonces ha estado viajando en contacto siempre con nosotros, su público. Para 2022, Paco Barrios tiene mucho en el tintero: el proyecto «Soñar no cuesta nada»con Santiago Ojeda (Botellita de Jerez), Josué Vergara (Los Jijos del Maíz), Vico Díaz y Jorge Luis «Cox» Gaitán; y también esperamos que salga a la luz El Mastuerzo: un son para bailar con invitados como Calle 4, Beto Delgado y diversos invitados.
Gracias Paco, por abrirnos las puertas de tu casa y de tu historia, vale la pena seguir luchando, seguir resistiendo.
Para estar pendiente de todas las actividades de Paco Barrios, su música, presentaciones, transmisiones en vivo, etcétera, siguelo en todas sus redes sociales como Facebook o Twitter y plataformas como Spotify, Tidal o Youtube.