Lee Fields hechiza a México con el soul

Las prolijas cartas de presentación de Lee Fields son sin duda su excelso acervo musical. Con diez álbumes de larga duración y uno más grabado en formato Ep llamado Two Jobs bajo el sello discográfico de Daptone Records. El nacido en Wilson, Carolina del Norte, Estados Unidos, se presentó por primera ocasión en tierras mexicanas el pasado 14 de enero.

Apodado Little JB por su parecido físico y vocal al legendario James Brown, mostró el porqué es considerado como uno de los símbolos del soul en la actualidad. Dando y dejando en cada presentación una cátedra y vínculo entre el movimiento del cuerpo como una aparente extensión de su interior <algo que domina con una amplia inteligencia escénica>.

En el historial artístico de este músico afroamericano encontraremos un conjunto de apariciones y participaciones a destacar como en la serie Law & Orden, donde emplearon en la decimotercera temporada la icónica canción “Honey Dove”. “Forever” haría lo propio en un comercial para el Super Bowl número LVII.

Nos dimos cita en la Calle Zacatecas 39, Col. Roma Norte, dentro del Foro Indie Rocks! en la Ciudad de México.

Y La Bamba, liderada por la méxicoamericana Luz Elena Mendoza sería la artista abridora del recital, ofertando una interesante propuesta acústica. Un coleccionismo detallado de sonidos latinos: yendo y viniendo del indie al folk; de lo alternativo a lo experimental del sonido electro-lúdico; del español al inglés.

¡Bienvenidos al concierto de Mr. Lee Fieds!

Lee apareció con su prodigiosa vestimenta al fiel estilo retro soul; con los colores armónicos del funk y exudando ritmos de resistencia a la pura manifestación y melancolía generada desde el rhythm and blues. De inicio a fin, los espectadores se rendirían como testigos ante los capítulos de la noche; siendo llevados por la vena salvaje de la leyenda: unos brincaban hasta transpirar libertad, otros bailaban con sus parejas enamorados al son indomable de la banda The Expression; unos más les vi sonriendo sin freno por esa carretera emotiva cuando el cantante giraba y alzaba su voz hasta mostrar la tesitura de su alma.

¿Qué se necesita vivir para sedar la vida con ese lenguaje hipnótico? No lo sé, pero lo hizo; el hechizo transformó y devoró el espíritu de cada asistente. Te comparto el setlist con el que Lee Fields nos embrujó esa noche.

Fotografías: Miguel Domínguez

Sobre el autor /

Escritor y columnista mexicano

Deja tu comentario

Your email address will not be published.