¿A dónde se han ido todas las canciones?

 

¿A dónde se han ido todas las canciones

que una vez compuse en mi adolescencia?

Empecé a escribir porque era mi anhelo

formar una banda y ser el vocalista.

 

Los versos formaban melodías cándidas,

“dinamita pura” para los oídos

de todos los jóvenes. Pero como nunca

con los instrumentos tuve habilidades,

componía la música en mis pensamientos

mientras caminaba solo entre las calles,

o sentado al fondo de los autobuses

y en la soledad de mi habitación,

cuando nada había que pedirle al mundo

porque me encontraba lleno de esperanzas.

 

Primero canciones, álbumes completos

se reproducían en mi voz interna

en aquellos años en los que las redes

aún no vaciaban todo de nosotros.

Los tempos precisos, los sonidos tersos,

ritmos y armonías entonadas siempre.

Yo me imaginaba cambiando los cursos

del rock mexicano, del puto Universo.

 

Pero por mis manos nunca se cruzó

ningún bajo o piano, acaso una pluma.

Y de las guitarras el único llanto

que les arrancaba no eran más que círculos

que incluso a los neófitos causarían gracia.

 

Mientras, las canciones seguían formándose,

tocándose en mí, como los melómanos

que ponen un disco una y otra vez,

pero yo lo hacía con tanto candor,

sin llegar a nada, hasta que por fin

todas las canciones dieron paso a versos,

a cuentos o ensayos y, sin darme cuenta,

como los amores llenos de arrebato

que el tiempo consume lento y sin sorpresas,

todos mis deseos desaparecieron.

 

¿A dónde se han ido todas las canciones

que siempre cantaba en mi adolescencia?

 

Quizá se traslucen muy de vez en cuando

en algunos textos como tenues sombras.

Quizá su arquetipo, su liviana esencia,

más liviana incluso que la de un espectro,

todavía vibra, suena en la negrura

entre la frontera donde acaba el Cosmos

y los turbios márgenes de mi propio olvido.

 

Tal vez esperando que un muchacho ingenuo

lleno de esperanza y un poco de fe

las tome en sus manos sin saber bien cómo

y les dé por fin una forma audible.

 

* * *

¿Sin tiempo para leer la columna? Escúchala a través de Indisciplina Podcast. Disponible en Anchor, Breaker, Overcast, Pocket Casts, Radio Public, Listen Notes, Google, Apple Podcasts y Spotify:

* * *

Sobre el autor /

escritor | melómano | locutor | teórico de la industria del ocio | editor @espejohumeanter | columnista @melomano.media | autor de Cuentos de bajo presupuesto y Rabia | ikari

1 comentario

Deja tu comentario

Your email address will not be published.