- Playlist en el marco de la celebración del Orgullo 2020
Este 28 de junio se cumple un año más de la conmemoración de los disturbios de Stonewall, evento que en 1969 cambió la historia y generó un movimiento de liberación y orgullo homosexual en tiempos en donde ser gay, trans o lesbiana era prácticamente criminalizado.
La celebración de este año se vio opacada (como muchísimas otras situaciones) por la pandemia del coronavirus, y por primera vez en varios años no habrá marcha presencial por lo que todo se transmitirá vía Youtube, al menos en lo que corresponde a la Ciudad de México.
En esta ocasión, el evento reúne a músicos, artistas, youtubers y comediantes que forman parte del colectivo Lésbico, Gay, Bisexual, Travesti, Transgénero, Transexual, Intersexual, Queer y más (LGBTTTIQ+), así como aliados a la comunidad que siempre han mostrado apoyo al sector.
La Marcha de la CDMX se integra por primera vez a la “nueva normalidad” donde hacer transmisiones en vivo ya se convirtió en un método seguro y muy accesible en tiempos de Covid-19.
Me llamó la atención la gran cantidad de artistas LGBTTTIQ+ que encontré en Spotify para realizar mi ya tradicional playlist del ORGULLO, en esta ocasión para ALTERNATIVA.
Es maravilloso como en la actualidad tenemos acceso tan fácil y rápido ha escuchar música nueva, variada y sobre todo diversa, con tan sólo dar un click o desde la comodidad de nuestro celular.
Me parece fantástico que personas que forman parte de la diversidad sexual estén haciendo música de diferentes géneros; desde el electropop, la cumbia, el rock, el punk, el reggaeton, etcétera. En la actualidad LA MÚSICA NO DISCRIMINA.
Para esta selección musical decidí ser ecléctico para reflejar que lo LGBTTTIQ+ es extremadamente diverso y va más allá de jotear con “Todos me miran”, cantar canciones despechadas como “El me mintió, “Sin él”, o la “Maldita primavera”, o bailar la coreografía pop de “Me pongo mis jeans”. Esta playlist celebra al cien por ciento la inclusión.
Recordemos que para llegar a esta libertad y reconocimiento, han pasado años de lucha constante donde las personas de la diversidad sexual nos hemos enfrentado a actos de discriminación, acoso, falta de empatía, clasismo, racismo, agresiones, bullying y en los casos más extremos hasta la muerte.
Todas estas situaciones han sido constantes y se dan en ámbitos como el trabajo, la escuela, el mismo núcleo familiar o la calle. Hoy seguimos alzando la voz y haciéndonos presentes en una sociedad que por muchos años ha pisoteado los derechos de muchos(as) y ha considerado a la heterosexualidad como lo “correcto”, invisibilizando a las orientaciones e identidades distintas, tachándolas de “incorrectas”, “retorcidas” o “antinaturales”.
Que no se olvide que seguiremos saliendo a las calles exigiendo respeto y derechos. Que no se olvide a Marsha P. Johnson y Sylvia Rivera, activistas que en el 69 se enfrentaron con la policía y que dieron pie a este movimiento de liberación.
Que no se olvide a las mujeres y hombres trans. Que no se olvide a las personas VIH positivas. Que no se olvide a los hombres gays. Que no se olvide a las mujeres lesbianas.
Que no se olvide a los(as) intersexuales. Que no se olvide a las trabajadoras sexuales trans a quienes se les ha cerrado toda oportunidad de empleo por su identidad. Que no se olvide a quienes han sido víctimas de crímenes de odio. Que no se olvide a los que han sido golpeados y atacados por ser homosexuales.
Que no se olvide a todas y todos los que han sido corridos de sus casas por su identidad u orientación. Que no se olvide a los gays que viven en comunidades alejadas donde el machismo es una constante.
Que no se olvide a las muxes. Que no se olvide lo no binario. Que no se olvide el género fluido. Que no se olvide lo andrógino.
Que no se olvide a los hombres y mujeres de raza negra que han sufrido doble discriminación por su color de piel y su orientación o identidad. Que no se olvide la bisexualidad.
Que no se olvide lo queer como posicionamiento político. Que no se olvide a las drag queens, drag kings y bio queens. Que no se olvide que las terapias de conversión son una mentira. Que no se olvide que la homosexualidad no es una enfermedad.
Que no se olvide lo afeminando. Que no se olvide que lo femenino no es sinónimo de menosprecio, ni de debilidad, ni de vergüenza. Que no se olvide el vogue. Que no se olviden todas las identidades, todas las expresiones y todas las orientaciones.
Que no se olvide que todos(as) somos personas que valemos y somos importantes. Que no se olvide que todos(as) tenemos libertad de amar. Por favor, que esto y muchas cosas más, no se olviden.
Nos leemos a la próxima.