Viaje a SulaMadiana
Percusiones, muchas y distintas; no son percusiones ordinarias: tamborileos y redobles inundan todo, como una avenida en torrente, con un caudal rebosando cascabeles y sonajas, cajas, yembés, bongós, udus y platillos; no se detiene ahí, teclas, cuerdas, cuerpo y voz nos empapan también; palabras, exhalaciones y cantos nos cubren. Los tambores encendidos, con las manos percutidos, extienden sonidos en cadencia sobre graves electrónicos.
Una minimalista trompeta aterciopelada respira del aliento de un especialista del jazz ambient que, si bien suele ofrecernos notas nostálgicas, en SulaMadiana desata colores fantásticos, texturas cálidas y entornos de un espeso bosque tropical.
Herederos de la música de Miles Davis, Jimmy Cobb, Tony Allen y Manu Dibango, trompeta y percusiones invitan a bailar, reír, jugar, flotar sobre las notas y compases de su lenguaje.
SulaMadiana es una isla formada en la imaginación de Mino Cinelu, uno de los percusionistas fundamentales del último medio siglo y Nils Petter Molvær, clave en el acoplamiento del jazz con la electrónica creativa. Son las islas de Sula en Noruega y Madiana en referencia a Martinica.
El océano musical se refleja en las aguas de este disco único, de una colaboración quizá irrepetible; la tierra huele húmeda y fértil en esta grabación de música orgánica contemporánea. Un jazz entendido más como un espíritu que como un género musical. Jazzear lleva a romper los límites, abrir fronteras, combinar estilos, rebelarse, reinventarse, unir fuerzas.
Todos los discos se disfrutan mejor si se les otorga atención, mejor aún si es exclusiva. Este en especial invita al oyente a una interacción muy intima y constante. Si el espectador quiere vivir la experiencia completa, deberá poner de sí, con su actitud, con su entusiasmo, con su disposición a escuchar e internarse en los peculiares territorios de SulaMadiana.
Puedes disfrutar de este extraordinario álbum en la plataforma de streaming de tu preferencia.